Así será la Parroquia Divino Salvador

Aunque todavía no saben cuando comenzarán las obras, ya que depende de con qué rapidez se recaude la cantidad mínima suficiente que hace falta “para que el obispado de permiso para iniciar el proceso”, los Salvatorianos de Montecarmelo y sus feligreses ya saben como será su futura parroquia.

La revista ZitusMadrid ha hablado con Iñigo Terrés Aboitiz, su arquitecto, quién les ha dado todo tipo de detalles.

 – “El edificio consta de tres cuerpos diferenciados, unidos por el vestíbulo de acceso, a través del cual se articulan las circulaciones del conjunto. El primer cuerpo es un elemento lineal encajado en el terreno que resuelve la diferencia de cota del promontorio sobre el que se asienta el cementerio y la rasante de la urbanización de la parcela, destinado a acoger las aulas de usos múltiples y las oficinas parroquiales. En el segundo cuerpo encontraremos los usos principales del edificio: un templo con capacidad para 400 personas, una capilla para 100,  y una cripta columbario, bajo estos espacios sagrados, con capacidad para 650 nichos. La planta bajo rasante alberga también un garaje para 17 vehículos. El tercer cuerpo es un prisma lineal que se macla con el anterior, ayudando a configurar el espacio del templo. Consta de dos plantas y contiene dos viviendas y aulas. Todo el complejo se basa en  tres materiales: la piedra, la madera y la luz».

– ¿En que se inspiró a la hora de realizar el proyecto?
– “El proyecto surge de dentro a fuera. Me gustaba la idea de hacer una gran cruz iluminada a contra luz (piedad), que no tocara el suelo ni se viera la sujeción en el techo (elemento pesado que levita). Era una manera de representar la paradoja de que Dios crea las leyes que ordenan nuestro mundo y sin embargo no le afectan (porque es Dios, claro)».

– ¿La luz juega un papel esencial?
– “Si, la atmósfera de la iglesia cambia radicalmente según las distintas horas del día. La doble cáscara que delimita el espacio principal permite circular por dentro de ésa piel generando conexiones espaciales (visuales) entre elementos que no tienen aparentemente ninguna relación».