En un comunicado firmado por la AME (Asociación Madrileña de Enfermería), la Coordinadora Fuencarral por lo Público, PATUSALUD (Plataforma Asamblearia de trabajadores y Usuarios por la Salud), la Plataforma de trabajadores del Hospital La Paz y la Asociación El defensor del paciente se denuncia el desmantelamiento del Hospital La Paz.
Según se señala en el comunicado, el Hospital de La Paz “cada año, tiene menos camas operativas, lo que repercute en el colapso de las urgencias y en la lista de espera de los pacientes”. A continuación detallamos el comunicado:
Entre 2011 y 2012, las camas instaladas pasaron de 1318 a 1277, 41 camas menos; los quirófanos pasaron de 51 a 48, según aparece en las memorias del hospital. En 2012 se cerraron 2 camas de UVI que no se han vuelto a abrir; este año ha desaparecido la UCI del Carlos III (4 camas). En 2012, se perdieron 18 camas en el Hospital de Traumatología ( entre la 3ª y la 5ª) En 2013 se han perdido 15 camas de cirugía de corta estancia, 8 camas de cirugía y 13 camas en plantas de Medicina y 8 camas de cirugía en la 5ª Centro. Respecto al verano, es evidente que no sólo importa el nº de camas que se cierran, sino el periodo durante el cual se cierran. El verano de 2012 se inhabilitaron 26.805 estancias hospitalarias, mientras que el verano de 2013 las estancias hospitalarias inhabilitadas fueron de 31.230, lo que supone un incremento del 16,5%. Este verano, se aumenta en un mes el cierre de 22 camas, y hay 19 camas de Cardiología (UCE) y 10 camas de traumatología que no se cerraron el año pasado y este año sí. Están previstas cerrar más camas de Reanimaciones y URPA, entre 8 y 19 según el periodo, aunque sospechamos que aumentarán puesto que aún no han salido las planillas del personal de agosto, demostrando la improvisación y falta de planificación por parte de la gerencia del hospital.
La amortización de las plazas del personal que se jubila, algunos forzosamente, y la no sustitución de las bajas hasta los 30 días, repercute en la calidad asistencial que reciben los pacientes, por tener que ser atendidos por menos personal, y en las listas de espera para la 1ª consulta al especialista (en algunas consultas están citando para Enero-2015, más de 180 días en 1ª consulta), para las pruebas diagnósticas, y para la lista de espera quirúrgica.
La reducción de camas disponibles en el hospital, el aumento de lista de espera en cirugía y en la primera consulta al especialista, el aumento de lista de espera en pruebas diagnósticas, la no asistencia sanitaria a inmigrantes en primaria, hace que los pacientes acudan más a urgencias produciendo el colapso, sobrecarga y falta de condiciones óptimas denunciado por los compañeros de urgencias (muchos pacientes en sillones que no contabilizan en ratio enfermera/paciente).
Según datos recogidos en Marzo y Abril de este año, con una afluencia media de 350-400 pacientes/día, un 15% de los pacientes se ingresan en hospitales de apoyo (Cantoblanco y Carlos III), un 13% pasan más de 24 h. en urgencias pendiente de ingreso, un 7,5 % más de 48 h, y un 4% más de 72 h. pudiendo llegar a estar 4 ó 5 días pendientes de cama. Esta situación se agravará previsiblemente durante el verano, al cerrarse unas 300 camas en H. La Paz, más 48 camas en el Hospital de Cantoblanco y 30 en el Carlos III.
Las asociaciones firmantes señalan que “son las decisiones políticas las que producen el deterioro de la atención que se da a los pacientes, situación que no se solucionará sólo con más personal o la reordenación de la urgencia, que también es necesario, sino con una verdadera voluntad de solucionar el problema y dar una atención sanitaria de calidad en todos los niveles de atención incluyendo, por supuesto, la atención precoz y adecuada a las necesidades de la población”.
EQUO Madrid también se suma al comunicado
El partido «verde», EQUO Madrid, también ha querido sumarse a éste comunicado, y califica esta situación como «insostenible», dadas las condiciones en las que se encuentran los pacientes. «Muchos son ubicados en sillones o en camillas y pueden permanecer en Urgencias hasta 5 días, sin poder ser trasladados a planta, con todo lo que ello supone: apenas una hora de visitas al día, sin luz natural, y sin apenas posibilidades de asearse o tener intimidad.»
La coportavoz de EQUO Madrid, Inés Sabanés, advierte de la gravedad de la situación, ya denunciada en los juzgados por el personal de enfermería, que podría estar vulnerando derechos básicos de los pacientes.
Sabanés ha defendido también a los trabajadores del centro, alegando que “la única razón por la cual el servicio de urgencias sigue funcionando es por la excelente profesionalidad del personal de este centro hospitalario, que bajo condiciones muy duras de trabajo intentan mantener la mejor calidad de asistencia con cada vez menos recursos”
EQUO Madrid ha exigido a la dirección del Hospital que deje de negar la realidad de la situación del servicio, y que garantice el mantenimiento de un número suficiente de camas abiertas en el hospital para solucionar la congestión crónica del servicio de Urgencias. Así mismo, la dirección debe dotar al servicio de personal de enfermería suficiente para atender el número real de pacientes que se ven obligados a utilizar el servicio de Urgencias.