Los discursos, que pretendían defender la sanidad y educación públicas y demostrar la buena labor de las Mareas, acabaron convirtiéndose en un mitin contra los recortes económicos impulsados por el Partido Popular.
Una vez más, la política vuelve a eclipsar las fiestas del barrio del Pilar. El pregón de fiestas, que este año correspondía a dos miembros de las mareas ciudadanas «blanca» y «verde» en defensa de la educación y sanidad públicas, acabó siendo un acto politizado que perdió todo el sentido lúdico y festivo al acabar creando una gran discordancia política entre los allí presentes.
Los responsables de leer los pregones de las fiestas fueron Felipe Aguado, un ex-profesor del IES Cardenal Herrera Oria, y una médico del hospital La Paz, ambos participantes en la Marea Verde por la educación pública y la Marea Blanca por la sanidad pública.
Los representantes de Ciudadanos en el distrito ya anunciaron que no subirían al escenario ni participarían en un pregón politizado: «Las fiestas son para los vecinos, no para los partidos, para todos sin distinción ideológica», afirmaba la concejala Sofía Miranda en Twitter.
Los miembros del Partido Popular, Partido Socialista y Ahora Madrid, junto a algunos representantes de entidades vecinales sí subieron al escenario, pero el discurso ya prometía desde sus primeras líneas:
«El cambio en el Ayuntamiento también tiene que llegar a actos como éste, que no va a ser un tributo a famosos ni un discurso de chistes y gracietas. Lo enfocamos más como una llamada a pasarlo bien, pero no a una diversión inconsciente. Queremos recordar que nuestros problemas siguen y hay que luchar por solucionarlos. Pasémoslo bien, porque lo merecemos, pero sin olvidar lo que ocurre a nuestro alrededor», leía el pregonero.
Posteriormente el pregonero hizo un repaso a los recortes que ha sufrido la educación pública en general y muy especialmente en el distrito: «Se ha incrementado la ratio alumnos/profesor, reduciendo aulas y masificando centros, como los CEIP Gabriela Mistral, L. Calvo Sotelo, Josep Tarradellas y Antonio Fontán, o en el IES Mirasierra, mientras se cierran centros y se infrautilizan otros o tienen la amenaza permanente de su cierre como los CEIP Vasco Núñez de Balboa o José Bergamín; faltan plazas en la educación pública mientras se cede suelo público para la construcción de centros privados, como está ocurriendo en Las Tablas, Arroyofresno y Montecarmelo, que no tienen ningún instituto público y un CEIP a medio construir, el Blas de Lezo; se pierden unidades de formación profesional como ha ocurrido en el IES B. Pérez Galdós…», continuaba.
El momento clave del discurso llegó cuando Aguado mencionó la palabra «sobres»: «Tenemos derecho a divertirnos y pasarlo bien después de un trabajo firme y honrado, con el que nos hemos ganado nuestro pan, sin meter la mano en ningún sitio ni recibir sobres de nadie«, en relación a la presunta financiación ilegal del Partido Popular. En ese momento, los miembros del PP allí presentes se bajaron del escenario mientras el público aplaudía por un lado y abucheaba por el otro, mientras el pregonero intentaba continuar su discurso. Posteriormente fue el turno de la portavoz de Marea Blanca, en una lectura que finalizó sin incidentes.
Posteriormente, el intercambio dialéctico se trasladó a las redes sociales, donde los miembros del PP calificaban el discurso como «sectario, cargado de sinrazón y mentiras», mientras que la propia cuenta del PP de Fuencarral calificaba el pregón como «decepcionante, politizado y demagógico». «El problema no son las palabras, es el sitio. Cada tema tiene su momento. Unas fiestas no lo son», concluían en respuesta a una crítica lanzada desde el perfil de AhoraMadrid Fuencarral-El Pardo.
Lee aquí el discurso completo del miembro de Marea Verde por la Educación Pública.