Educación asegura que el traslado de los alumnos del IES Las Tablas ha sido «a coste cero»

Foto: AMPA IES Malala

Los padres y madres denuncian la paralización de las obras del IES Malala Yousafzai y piden una reunión al Consejero de Educación. Mientras tanto, la consejería asegura a este diario que el traslado de los alumnos al colegio privado Estudiantes no ha supuesto coste alguno. 

Según ha informado la directora del área territorial de Madrid-Capital de la Consejería de Educación en respuesta a un requerimiento de información pública promovido por este diario, la Comunidad de Madrid suscribió un «acuerdo de colaboración» con el colegio privado «Estudiantes Las Tablas» para el uso de una parte de las instalaciones educativas de dicho centro.

En dicho acuerdo, según informa la Consejería, la cesión de los espacios está vigente desde el 1 de septiembre de 2017 hasta el 30 de junio de 2018 o tras la conclusión de las obras del nuevo instituto de Las Tablas -que llevará el nombre de Malala Yousafzai- si esta es anterior.

La consejería asegura que «en ningún apartado de dicho Acuerdo de Colaboración se recoge obligación alguna de compensación económica a realizar por la Consejería de Educación, la cual no ha sido exigida por el colegio privado Estudiantes Las Tablas». La carta finaliza asegurando que «en consecuencia, no existe acuerdo que conlleve coste económico para la administración, la cual inclusive no ha de abonar gasto alguno en conceptos de suministros de las instalaciones».

Las obras del nuevo instituto, paradas

El AMPA del IES Malala Yousazfai y la Plataforma por la Educación Pública de Las Tablas registraron, el pasado 18 de octubre, una carta destinada al Consejero de Educación, Rafael Van Grieken, para solicitar una reunión urgente -todavía sin respuesta- para que les explique la situación actual de las obras y las acciones que llevará a cabo la consejería.

Al mismo tiempo, piden un canal informativo contínuo sobre el estado de las obras, la fecha de reanudación y de finalización de las mismas y la exigencia para acabarlo de forma inmediata y completa, rechazando la construcción por fases.

En dicha carta denuncian que los alumnos trasladados al Colegio Estudiantes se encuentran «hacinados» en cuatro aulas, sin espacio y sin posibilidad de usar las instalaciones deportivas, además de no disponer de material «de ningún tipo, ni laboratorio, ni deportivo, ni un lugar donde dejar los libros». Además, aseguran que los profesores «no disponen de espacio para realizar su labor».