El Ayuntamiento rinde homenaje al médico anestesista Luis Montes Mieza por «su defensa de la sanidad pública y su lucha por el derecho a morir de forma digna» dedicándole la glorieta situada entre Valle de Mena y César Manrique.
Madrid recordará en su callejero al doctor Luis Montes, el médico anestesista y presidente federal de la asociación Derecho a Morir Dignamente fallecido en abril de este año. Una glorieta en el el límite entre los distritos de Fuencarral-El Pardo y Moncloa-Aravaca llevará su nombre, en reconocimiento “a su dilatado servicio y dedicación a los pacientes, su defensa de la sanidad pública y su lucha por el derecho a morir de forma digna”.
Luis Montes Mieza, durante años coordinador de urgencias del Hospital Severo Ochoa, fue llevado a los tribunales por la Comunidad de Madrid en 2005 a raíz de dos denuncias anónimas que le acusaban de 400 presuntas «sedaciones terminales irregulares». La Audiencia Provincial de Madrid sobreseyó el caso en 2008. Desde 2009, se puso al frente de la Presidencia de la asociación Derecho a Morir Dignamente, asociación que defiende la despenalización de la eutanasia, el acceso universal a los cuidados paliativos, a la sedación, la implantación y difusión del testamento vital, y el derecho a la autonomía del paciente, así como el respeto a su voluntad y libertad individual.
En reconocimiento a su labor, la Junta de Gobierno municipal ha aprobado dar el nombre de glorieta de Luis Montes Mieza al espacio formado por la intersección de los viales César Manrique, Antonio Marchado y Valle de Mena, en el distrito de Moncloa-Aravaca.
Asimismo, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid del pasado miércoles 7 de noviembre aprobó dar el nombre de nueve regidores de la II República a sendas calles situadas en el distrito de Hortaleza. Son cinco alcaldes de Canillas y cuatro de Hortaleza, dos zonas que en ese momento eran municipios independientes y que fueron anexionadas a la capital en 1949.
El científico experto en magnetismo Salvador Velayos Hermida, que desempeñó su labor en la Universidad Complutense de Madrid y da nombre al Instituto de Magnetismo, dará también nombre a una glorieta de la Ciudad Universitaria, la situada en la intersección de la avenida Complutense con la calle Profesor José García Santesmases.