Es innegable que los hogares del norte de Madrid cada vez están más modernizados en múltiples aspectos. Un claro ejemplo de ello hace referencia a los elementos tecnológicos que están presentes en dichas viviendas, especialmente los que cuentan con un sistema inteligente.
La tendencia no solo se está produciendo en Madrid. Según indican en Redciudadesinteligentes.es el crecimiento de este tipo de artículos de tan avanzada tecnología es imparable a nivel europeo e incluso en el resto del mundo, sobre todo en las zonas más desarrolladas en términos monetarios.
Y es que los productos inteligentes requieren una cierta inversión económica, convirtiéndose éste en la primera desventaja que describiremos en Fuencarral-El Pardo. También analizaremos los cuantiosos puntos positivos que los madrileños tienen en cuenta a la hora de decidirse a implementarlos en sus respectivos domicilios.
Precio y período de adaptación
Lo cierto es que en caso de tener una amplia lista de desventajas, los dispositivos inteligentes no estarían cosechando tal éxito como el que registran hoy en día. De hecho, solo dos puntos mejorables se hacen evidentes al tratar con ellos.
El primero guarda relación, como hemos indicado en anteriores líneas, con los precios. Aunque aprovechando ofertas y períodos promocionales – ejemplificándolo el Black Friday– es posible conseguir unidades asequibles, en líneas generales dotar de inteligencia a un hogar madrileño supone una notable inversión.
Por otra parte, también ha de ser mencionado el período de adaptación que se requiere para aprender a utilizar todas las funciones de los aparatos tecnológicos. Conviene destacar que su creación pretende facilitar e incluso automatizar multitud de acciones –y lo consigue–, pero obtener dichos resultados no es inmediato, especialmente si la persona en cuestión no está acostumbrada a tratar con tecnología.
Una lista interminable de beneficios
Los dos aspectos no demasiado positivos quedan relegados a un segundo plano debido a las numerosas ventajas. Muchas de ellas están relacionadas con cómo influyen en nuestra vida.
Por ejemplo, la conocida por ser hoy en día la mejor cafetera de cápsulas permite a los madrileños disfrutar de su bebida favorita ahorrando tiempo en la elaboración de la misma. Gracias a la sencillez y la rapidez no es de extrañar que diariamente, desde estudiantes hasta trabajadores, se preparen su café antes de dar comienzo a la jornada lectiva o profesional.
Uno de los mayores beneficios está avalado por psicólogos profesionales: gozar de un bienestar superior en la vivienda. Este aspecto es de suma trascendencia, puesto que todos los habitantes de la capital española se caracterizan por pasar muchas horas en sus domicilios. Así pues, es esencial que mentalmente permanezcan a gusto con todo lo que tienen a su alrededor: dormitorio, comedor, etcétera.
Algunos de los dispositivos inteligentes que tanto se dejan ver últimamente en los hogares madrileños están pensados precisamente para incrementar dicha sensación de bienestar. Así lo demuestran los robots aspiradores que acaban con la suciedad del suelo evitándole al propietario o inquilino llevar a cabo las siempre tediosas tareas de limpieza.
Aquí no termina la amplísima lista de ventajas. ¿Sabías que, sobre todo los equipos de automatización, consiguen reducir el importe de las facturas de luz? Gracias al excelente control tanto la energía eléctrica como otros aspectos que pueden derivar en un considerable gasto mensual o trimestral –gas, agua, etcétera– se ven optimizados.
Por si fuera poco, a todo ello se suma un mayor nivel de seguridad. Gracias a poder controlar a distancia determinados aspectos de la vivienda, en la época vacacional en la que nos encontramos, los madrileños se ven capaces de abandonar temporalmente su domicilio sabiendo que todo va bien por muchos kilómetros que les separen de la vivienda.