La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cerró todas las peluquerías de la región para evitar la expansión del coronavirus (COVID-19). La medida se tomó en apoyo a la patronal de peluqueros y de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), quienes exigían el cierre de los establecimientos por el riesgo de contagio en su actividad.
Y es que, el Gobierno justificó que las peluquerías permanecieran abiertas durante el estado de alarma como medida para mejorar la higiene de personas avanzada. Sin embargo, la labor de peluqueros y estilistas se desarrolla en ambientes cerrados, por tanto, la cercanía con los clientes es un problema.
La presidenta, preocupada por la situación, manifestó que era innecesario continuar con las actividades del sector. “No se entiende que los profesionales de este sector tan numeroso en Madrid, que tienen que estar piel con piel en contacto con los clientes, tengan que estar abiertos. Tengo que protegerlo por encima de todos”, detalló.
En declaraciones a Telemadrid, Díaz Ayuso señaló que prefiere que los mayores y otras personas que necesiten el servicio de peluquería tengan el cabello sucio pero estén sanos, ya que los centros y salones podrían ser un lugar de alto riesgo de contagio.
Durante la cuarentena las personas deberán buscar alternativas en casa para mantener sus cuidados usuales. Esto es sencillo, ya que hoy en día hay sets de tijeras básicas de peluquería o tintes para cabello fabricados para uso doméstico, además de tutoriales que explican paso a paso como realizar un corte o tinturación.
Claro está, existe un mercado de personas cuya movilidad reducida les impide mantener estos cuidados por sí solos. Por esta razón, el asesor jurídico de CONEPE, Antonio Jaumandreu, solicitó a los profesionales del sector que limiten su actividad a servicios muy básicos para atenderlos. Los profesionales que realizarán servicios de corte de cabello deberán hacerlo con la máxima cautela: “Deben llevar guantes y mascarilla. Sin el equipamiento y las precauciones necesarias no se puede atender a nadie”, manifestó Jaumandreu.
Los representantes de la Asociación Provincial de Empresarios y Peluquería (Apepca) y la Asociación de Esteticistas y Maquilladores de Alicante y España (Aempae) reconocen que el cierre de peluquerías generará mucho daño al sector, ya que obligará a tomar medidas muy duras con los empleados.
Definitivamente, a diferencia de países como México, en los que el mismo presidente ha invitado a la población a continuar con vida normal, España ha tomado decisiones radicales cerrando cualquier sector empresarial y actividad no esencial.