No es poder, es querer

Lorenzo Álvarez Martín
Presidente de la Asociación Vecinal de Las Tablas


Valoraciones Estado del Distrito Fuencarral-El Pardo 2020

Hoy se celebra el primer pleno del estado del distrito en la Junta Municipal de Fuencarral-El Pardo. Un pleno atípico, que no debería de serlo, si quien tiene la decisión política de dar participación a la ciudadanía, creyese firmemente en ella. Lamentablemente, esta pandemia esta sirviendo de coartada para quienes jamás han tenido ni han entendido que la participación de los ciudadanos en la vida publica es fundamental para el sostenimiento de esta democracia que cada vez se encuentra más amenazada por fuerzas oscuras, intereses oscuros y otros que no lo son tanto y que públicamente se jactan de ello.

Hoy se debería debatir sobre el estado de nuestro distrito, de nuestros barrios, entrando en lo micro, dejando de lado lo macro -también es importante-, pero en esta situación se hace necesariamente obligatorio abordar el problema de las familias, estas que tienen nombre y apellidos, número de portal y piso. Sin duda, se intentará llevar el debate a la polarización, para tal y como decía al principio, continuar con esa coartada que algunos les va genial.

Hace unos meses, que las organizaciones vecinales de nuestro distrito venimos solicitando mecanismos de interlocución y coordinación con la Junta Municipal del distrito. Recibimos el silencio que hemos obtenido desde el mes de marzo y si me apuran, con el mismo silencio chabacano que llevamos observando desde junio de 2019. Cuando uno no se cree la participación ciudadana en democracia, el silencio y el ninguneo es la estrategia.

Hace meses que la Asociación Vecinal de Las Tablas ha estado en la defensa del espacio que durante ocho años hemos venido gestionando, haciendo un referente no solo de Las Tablas sino también del distrito y del mismo Madrid. La despensa de Las Tablas ha gestionado más de 120 cestas de comida, miles de kilos de comida entregados a otras despensas solidarias a otros barrios, incluso a la campaña que con tanto éxito ha desarrollado la Policía Municipal de Madrid, para ayudar a quienes menos tienen y que verdaderamente lo están pasando mal. Todo esto mientras defendíamos el derecho de poder seguir haciéndolo en nuestra sede del Palomar, y frente a la tozuda insistencia del concejal para echarnos de allí. Hay aún un compromiso para resolver el problema del mismísimo alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, que a día de hoy no se ha traducido en nada.

En el pleno de hoy no se abordarán soluciones para resolver lo que ocurre en los nuevos barrios del distrito, los cuales, y durante más de 15 años, vienen padeciendo las carencias más básicas que ciudades de más de 35.000 almas necesitan para su día a día. Centro de salud, biblioteca, polideportivo, escuela de música, pistas deportivas, comisaría de policía, etc. De vez en cuanto se nos intenta engañar, pretendiendo desviar las verdaderas necesidades con banderas, homenajes y alegorías a Venezuela.

Tener el poder es saber usar el poder. Compartir la experiencia, compartir el consenso, compartir las responsabilidades, compartir con los ciudadanos la capacidad de gobernar, junto a ellos y no contra ellos, y con las entidades que años y años venimos trabajando en nuestros barrios. Es ser humilde, es ayudar y dejarse ayudar.

Tener el poder es, además, asumir aquello que se ha hecho y se ha comprometido, ayudando a que sea una realidad.

Hoy será otro de esos plenos del estado del distrito que pasará sin pena, para gloria de quienes están encantado con esta situación. Fuencarral-El Pardo ha tenido mala suerte en esa lotería que determina un sistema arcaico, cerrado, que una lista nos obliga a tener que aceptar.

El poder permite cambiar las cosas, permite cambiarlas con tus congéneres, con quienes compartes, aunque sea el aire de El Pardo que respiramos. El poder es ayudar a mejorar, desde el respeto a los demás y no desde el desprecio y la prepotencia.