Triunfo de gran mérito de los hombres de Diego Nogales que jugaron con 10 durante media hora de la segunda mitad
El Unión Adarve sigue con su racha imparable. El Vicente del Bosque acogió por última vez a “los lobos” en el año 2021. El líder recibía en casa al Marino de Luanco, equipo que marchaba en el puesto de playoff de descenso en la jornada anterior.
El encuentro comenzó con las fuerzas muy igualadas en ambos conjuntos. Por lo tanto, ningún equipo se hizo con el control del partido durante buena parte de la primera mitad. El Marino probó a tirar desde lejos, pero Parra blocaba fácil. El Adarve no encontraba los espacios para hacer daño a un Marino que estaba muy bien posicionado defensivamente. Además, el equipo del Barrio del Pilar cometía varias imprecisiones en el control del balón, lo que impedía trenzar jugadas combinativas.
Al paso de los minutos el Adarve mejoró y comenzó a inquietar la portería del Luanco. Al filo del descanso, estuvieron a punto de adelantarse en el marcador tras un gran desmarque de Montejo dentro del área. El ariete batió al portero pero su disparo salió demasiado a la izquierda y Maganto, a puerta vacía, llegó muy forzado para dirigir el tiro a gol.
El segundo acto comenzó a imagen y semejanza del primero. Los dos equipos realizaban posesiones estériles que no amenazaban con romper el marcador. Fue entonces cuando la estrella del líder, Álvaro Montejo, sacó de la manga una gran jugada personal por la banda izquierda que culminó con un zapatazo a la escuadra de Bussman (min. 55). No obstante, el guion del partido cambió súbitamente. Salama, recibió la segunda amarilla tras una falta al borde del área, el Adarve se quedaba con 10. Además, Diego Díaz equilibró el choque en aquel tiro libre. (min. 60).
El shock de recibir dos duros reveses consecutivos no les pasó factura y el equipo siguió inquietando la portería rival a base de coraje. Nogales movió el banquillo y dio entrada al capitán Miñambres y antes del gol gallego a Telle. De su mano, llegó el segundo gol de los rojinegros. Centro desde la derecha, la defensa gallega se quedó clavada y aprovechó el 20 para poner el 2-1 (min. 73).
Viendo el contexto del partido, los locales dieron un paso atrás para asegurar el resultado. Se marcharon en los últimos minutos los dos delanteros titulares (Portero y Montejo) y entraron Liaño y Andrei para sentenciar a la contra. Los dos recambios lograron el gol de la sentencia en el descuento. Balón en largo a los puntas, el portero salió en falso a cortar el envío a la banda derecha y Andrei centró a Liaño para empujar el esférico a las mallas (min. 93). El Adarve concluye el año liderando el grupo y manteniendo su racha de victorias en casa. 8 de 8 y, sobre todo, un 10 de 10 a la mitad de temporada del Adarve.