Actualmente, la fisioterapia de suelo pélvico es una alternativa muy recomendable para reforzar la musculatura y mantener una buena salud. En muchos casos, también sirve para mejorar la calidad de vida y aumentar la autoestima. Indudablemente, tener la cavidad pélvica en buenas condiciones es muy aconsejable para evitar que se descuelgue y pierda su funcionalidad.
El suelo pélvico tiene la función de sostén de los órganos que intervienen en los procesos de micción, defecación o sexualidad. Si estos músculos, que se ubican en la zona baja de la pelvis y abdomen, tienen alguna disfunción, podría afectar a la calidad de vida de la persona e influir en la continencia o estabilización de la zona lumbar.
¿Qué tratamientos existen para cuidar el suelo pélvico?
Una de las disfunciones más frecuentes en el suelo pélvico es la incontinencia urinaria, algo más habitual en la población femenina (20 % a 30 %). Según los datos ofrecidos por el Grupo Español de Suelo Pélvico, el 40 % de las mujeres podrían estar afectadas por este problema. Por lo tanto, es conveniente tratarlo y buscar soluciones para corregirlo. A continuación, enumeramos algunas de las terapias y ejercicios con mejores resultados.
La fisioterapia de suelo pélvico
Indudablemente, la fisioterapia se ha convertido en un tratamiento para los problemas relacionados con el suelo pélvico. En la mayoría de los casos, se ha notado una gran mejoría en la incontinencia urinaria o fecal, disfunciones en el preparto y postparto, vaginismo, etc.
La gimnasia hipopresiva
En los últimos tiempos, los hipopresivos, o denominados ejercicios de Kegel, se han puesto de moda. Estos sirven para activar la musculatura, para hacer como si se contuviese la orina. Cuando la persona es capaz de detectar dónde se localiza el suelo pélvico, podrá actuar para mejorar su funcionamiento y garantizar un estado mucho más saludable en cualquier etapa de su vida.
Hacer abdominales en V
Este tipo de ejercicio se caracteriza por tener un mejor resultado en el vientre. Requiere de fuerza y equilibrio, pero es ideal para el suelo pélvico. Consiste en contraer el abdomen y flexionar las piernas para conseguir formar un ángulo de 45º con las piernas y caderas. Posteriormente, hay que elevar el tronco hacia arriba para formar una V.
Uso de conos vaginales
Para concluir, cabe indicar que hay mujeres que prefieren usar dispositivos de resistencia como los conos vaginales. Esta práctica, que era muy habitual entre las geishas japonesas para ejercitar esta zona, sirve para contraer la musculatura del suelo pélvico.
En definitiva, si se produce dolor en la vejiga, recto, genitales, se orina con frecuencia, hay sensación de pesadez en esta zona, dolor menstrual o relaciones sexuales dolorosas, lo mejor es ponerse en contacto con fisioterapeutas especializados en esta anatomía para hacer un examen.
En resumen, el suelo pélvico es de gran importancia para nuestra salud y bienestar, por lo tanto, si hay alguna disfunción que nos afecte, debemos ponernos en manos de profesionales como eFISIO.es. Estos profesionales realizan su trabajo desde los diferentes centros de fisioterapia, autorizados por la Consejería de Sanidad, repartidos por la Comunidad de Madrid.