No hace tanto tiempo que a los adictos a las drogas se les colgaban las más feas etiquetas descalificativas. Sin embargo, nada más lejos de la realidad: un adicto a una droga puede ser una bellísima persona o un excelente profesional.
Para demostrar su potencial, tan solo necesita liberarse en un buen Centro de desintoxicación de la esclavitud a la que le somete la sustancia a la que es adicto.
El adicto es una persona enferma
Y es que las adicciones no son vicios, sino enfermedades, cada una de ellas con sus propias particularidades.
En este tipo de enfermedades, la droga modifica los mecanismos cerebrales y bioquímicos de quien la consume: al poco de comenzar con el consumo, el afectado se ve envuelto, de forma involuntaria, en una especie de tela de araña de la que es incapaz de liberarse.
Si decide no consumir más droga, su organismo la reclamará. Adicionalmente, cada vez necesitará más cantidad de droga para evitar que su organismo “proteste”.
El resultado es una espiral destructiva que lo engulle: el enfermo desea dejar de consumir, pero lo cierto es que cada vez consume más.
El síndrome de abstinencia: no es sencillo superarlo solo
Además, todos los Tratamientos de adicciones a drogas cuentan con un escollo que no es fácil de superar: el síndrome de abstinencia, más conocido como “mono” a nivel coloquial.
El llamado “mono” es el conjunto de síntomas desagradables que sufre el enfermo cuando es obligado a suspender el consumo de las sustancias a la que es adicto.
Se trata de un factor que hay que manejar con sumo cuidado, ya que las reacciones del organismo a la suspensión de la administración de la droga pueden provocar que el adicto se comporte de manera sumamente irracional, descontrolada y violenta.
Como ocurre con cualquier otra enfermedad, para superar una adicción es necesaria la correspondiente terapia
Para que el tratamiento tenga éxito, el abordaje terapéutico de una adicción a las drogas ha de incluir:
- En las adicciones físicas, la ayuda al paciente para superar el síndrome de abstinencia (puede requerir internamiento del afectado)
- En ocasiones, también se precisa terapia medicamentosa (incluso para algunas adicciones que son estrictamente psicológicas, como la adicción al juego)
- Terapia psicológica y conductual, que puede prolongarse durante periodos muy largos de tiempo
Centros de tratamiento: la opción más efectiva para tratar la enfermedad de la adicción
No hace falta reflexionar mucho para darse cuenta de que los tratamientos de las adicciones deben ser establecidos y controlados por profesionales de la máxima cualificación.
A modo de ejemplo, no sería muy inteligente intentar curar en casa a un enfermo que sufre una neumonía aguda. El mismo razonamiento hemos de aplicar para las adicciones.
Las intentonas bienintencionadas de familiares y amigos para que el asunto se quede en el ámbito familiar o en el entorno más cercano no funcionan: el afectado no consigue superar la adicción o recae con enorme rapidez.
En este sentido, los tratamientos de adicciones llevados a cabo en centros de desintoxicación especializados son los que presentan los índices más altos de éxito, junto con un bajo porcentaje de recaídas.