Los primeros años de tu vida no se repiten. Te marcan. En la Escuela Infantil Los Pitufos cuidan a sus pequeños como si lo recordasen a cada minuto. Un equipo de entrenadores de vida se ha preparado a conciencia para ello; no creen en los rincones de pensar y se centran en lo más importante: crear personas felices, con la autoestima como baluarte.
La Escuela Infantil Los Pitufos está formada por las mejores maestras y educadoras. Sandra es su directora, Guía Montessori certificada en disciplina positiva y una mujer muy contrastada en los centros infantiles; ya tiene dos funcionando, y abrirá este mismo mes la tercera escuela, todas ellas en el Barrio del Pilar. Mujeres que trabajan en un lugar que está a la altura de los pequeños, y que muestran los primeros pasos de vida con la emoción que se merece.
Las propias educadoras describen así su proyecto: “Tenemos presente que los niños nos aprenden. Aprenden lo que somos, lo que vivimos. Nos quieren por cómo somos. Validan todo lo que hacemos porque lo hacemos nosotras y nos permiten la libertad de experimentar, proponer, ofrecer… arriesgarnos. Para cumplir el objetivo de hacer felices a nuestros niños las Educadoras de Los Pitufos somos felices en nuestra práctica, disfrutamos con nuestro trabajo, nos permitimos caminar por distintas sendas descubriendo sin juicios previos y tomándonos nuestro tiempo para la práctica educativa”.
También responden a una pregunta: ¿Por qué la Pedagogía Montessori como ejemplo? “Porque parte de la sencillez, de lo que todos podemos hacer en casa, de la vida práctica, eso sí, entendida desde el profundo respeto al niño, a la infancia, a sus tiempos necesariospara aprender a procesar la información y a su capacidad innata para descubrir las cosas. La intención fundamental en nuestra metodología es devolver el tiempo y la calma que debe rodear a la infancia para que se desarrolle sin prisas, con momentos de experimentación y observación de las cosas sencillas que lograrán despertar su curiosidad, entonces el aprendizaje, llegará solo”.