El Ayuntamiento de Madrid extenderá los parquímetros a Peñagrande

El Ayuntamiento de Madrid instalará parquímetros en determinadas calles del barrio de Peñagrande antes del 2026 para facilitar el aparcamiento a los residentes en una zona con serios problemas de aparcamiento. 

Los parquímetros se expandirán por Madrid. Es la principal novedad de la nueva ordenanza de movilidad que ha preparado el gobierno municipal compuesto por PP y Ciudadanos, que necesitarán del apoyo de otros cuatro ediles para aprobarla el próximo 10 de septiembre en Cibeles.

El compromiso municipal pasa por que antes de llegar el año 2026, veinte nuevos barrios de la ciudad tengan Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en sus calles. Entre ellos estarán los barrios de Valdezarza y Peñagrande, dos de las últimas zonas del interior de la M-30 que no lo tenían instaurado.

En el caso de Peñagrande, esta implantación se realizará, según la ordenanza, «bajo demanda vecinal», un argumento con el que el Partido Popular, de quien depende el área de Movilidad, tratará de justificar la implantación de una medida que ya generó polémica en anteriores legislaturas y que, según la nueva ordenanza, deberá llevarse a cabo antes del 31 de diciembre de 2025.

No todo el barrio de Peñagrande se verá afectado por esta decisión. Los parquímetros llegarán a aquellas calles que sufren el denominado «efecto frontera«: las que se sitúan próximas al perímetro de la zona SER, y son utilizadas por residentes del entorno para aparcar por la noche, o por conductores de otras zonas que aparcan y continúan hacia el trabajo en Metro.

La implantación del SER se realizará en las zonas situadas en el entorno de las estaciones de metro Peñagrande y Avenida de la Ilustración, en el eje delimitado por las siguientes calles: avenida del Cardenal Herrera Oria; calle Isla de Tabarca hasta la glorieta de Mariano Salvador Maella; doctor Ramón Castroviejo (acera impar) hasta la glorieta de Isaac Rabin; calle Valle de Mena hasta glorieta Valle del Arce; camino de Ganapanes hasta su cruce con Santiago de Compostela, y siguiendo esta calle, hasta la avenida de Betanzos, en su límite con la zona SER del barrio del Pilar.

Área del barrio de Peñagrande donde está prevista la implantación del SER

Los argumentos esgrimidos por el gobierno municipal para ejecutar esta ampliación son varios: racionalizar el uso del espacio destinado a aparcamientos, evitar la «enorme presión» que sufren estas zonas, «especialmente las limítrofes»; y hacer compatible el «imprescindible estacionamiento de los residentes con la necesaria rotación para no residentes».

La memoria anexa a la nueva ordenanza señala la existencia de «un elevado nivel de indisciplina» en el estacionamiento de vehículos debido a la «acuciante falta de plazas», contabilizándose una media de cuatro vehículos mal estacionados diariamente por cada vehículo bien aparcado.

Los estudios municipales apuntan a una «sobreutilización del vehículo privado» y una «gran ineficiencia en ese uso» debido a la alta demanda de estacionamiento y la falta de regulación del aparcamiento en vía pública. En el caso de Peñagrande, este tipo de situaciones se dan diariamente en muchas de las calles que próximamente pasarán a estar reguladas por parquímetros.